Tocando vidas
Abril 08 de 2010
Por Alda Mera
Hoy llega a Cali el actor mexicano Eduardo Verástegui, quien después de una vida de excesos rectificó su camino y quiere contar su experiencia de vida a los caleños.
Mientras otros artistas andan obsesionados por mejorar su look para triunfar, él lucha justamente por lo contrario: no ser estereotipado como galán latino y embellecer su conciencia.
Para compartir el testimonio de ese proceso, el actor, productor y cantante mexicano Eduardo Verástegui, quien actuó junto a Sofía Vergara en la película ‘Papi chulo’, estará en el Teatro Municipal hoy, invitado por El Liceo Tacurí, el Colegio Juanambú y el Preescolar Tayana, instituciones Aspaen Cali. Así habló con El País uno de los 25 solteros más cotizados del mundo según People:
¿De qué hablará hoy en Cali?
De cómo yo a los 18 años creía que si lograba los sueños que la sociedad dice, fama, éxito, dinero, mujeres, iba a ser inmensamente feliz, y cómo luego de diez años veo que lo tengo todo, pero no tengo nada. A los 28 años, empecé a conectarme más con mi fe y hallé un tesoro que quiero compartir y es este cambio de vida y la felicidad, la paz, la serenidad, la alegría y el gozo que me ha dado.
¿Qué mensaje trae?
Hago una gira mundial llevándoles a los jóvenes un mensaje de amor, fe y esperanza para animarlos a que alcen la voz para defender a los que no tienen voz, a que no tengan miedo de defender a los indefensos, a los bebés que están en el vientre de una madre y están en riesgo de ser abortados.
¿Qué lo hizo tocar fondo?
El vacío existencial. Yo trabajaba duro, sin parar, viajando por todo el mundo, y me di cuenta que había logrado mis sueños pero me preguntaba ¿porqué estoy inquieto, me deprimo, estoy solo y no tengo paz? Uno cree que le falta más fama, dinero, mujeres, y empieza a acumular y se vuelve insaciable, hasta tocar fondo.
¿Qué hizo entonces?
Uno necesita pedir ayuda pero no sabe a quién, porque está en una burbuja donde reinan la vanidad, la soberbia, el ego. Yo ignoraba que en todo proyecto en que yo actuaba, afectaba a la gente, en especial a los jóvenes que ven los medios de comunicación y son educados por ellos. Termina uno envenenando a la sociedad y yo era parte del problema y no de la solución.
¿Cómo le puso valores al entretenimiento?
Comencé a estudiar ética y moral en las artes y en los medios de comunicación, y empecé a formar la conciencia y a actuar en proyectos con el potencial para aliviar y sanar las heridas de la sociedad, que eleven la dignidad humana y que cambien esta cultura de muerte por una cultura de vida.
Eduardo Verástegui dará su conferencia por la vida hoy a las 7:00 p.m., en el Teatro Municipal. Donación: $35.000. Informes: 5557502.
¿Qué le dijo su profesora de inglés que lo hizo reflexionar?
Con el método socrático, me hacía preguntas inteligentes: cuál es el propósito de la vida, porqué quieres ser actor, qué mensajes le estás dando a la sociedad, quién es Dios en tu vida; si tuvieras una hija, qué hombre te gustaría para que ella formara su familia... Y cuando yo lo describía, me contrapreguntaba: ¿tú eres ese hombre? De esa forma sutil, sin sentirme juzgado, entendí que debía cambiar mi vida.
¿Pero había hecho algo malo?
Justamente, yo pensaba: ‘mientras no mates y no robes a nadie, todo está bien, no soy un santo, pero soy buena persona’, pero sí había hecho mucho daño a través de las tonterías en las que trabajé, influencié de manera negativa a los jóvenes, entonces qué mejor manera de reparar ese daño que promover un estilo de vida coherente con las enseñanzas de Jesús.
¿Por qué tuvo que crear su productora de cine?
Me vi obligado a abrir una productora de cine. Nunca me imaginé ser productor, pero cuando hice este cambio de vida, prometí a Dios que jamás volvería a actuar en un proyecto que ofendiera mi fe, mi familia, mi comunidad latina que bastante atropellada está en Estados Unidos, pero mis empresarios no me entendieron. Cuando traté de buscar papeles que mostraran el verdadero rostro de los latinos en el cine me quedé cuatro años sin trabajo. Hasta que dije: si como actor no logro controlar el mensaje, tengo que ser productor, pero toqué puertas en Hollywood y no recibí sino rechazos. Hasta que la creamos con mis socios, el mexicano Alejandro Gómez y el barranquillero Leo Severino.
¿Cómo fue esa experiencia?
Nos tocó hacer todo a nosotros, pero gracias a Dios nos dio la sorpresa de que la película ‘Bella’ ganó el premio más importante del Festival de Toronto, fue a otros festivales, llegó a la Casa Blanca y fue premiada por su contribución a la comunidad latina en EE. UU. Eso nos dio credibilidad y así nos llegaron guiones para hacer cinco películas.
Entre tantos problemas, ¿porqué elige trabajar contra del aborto?
Cuando empecé a investigar para darle veracidad y autenticidad a mi personaje de mi película ‘Bella’, encontré a una niña mexicana a punto de abortar. Ella me reconoció por mis actuaciones en Tv. y el cine, nos hicimos amigos, nos abrazamos, lloramos y ella canceló su cita para el aborto y luego la llamé para ofrecerle mi ayuda. Me fui a Nueva York para filmar ‘Bella’ y a mi regreso me llamó su esposo para decirme que ya el niño nació y que lo van a llamar Eduardo.
¿Y luego qué pasó?
Cuando me ponen a Eduardito en mis brazos, sentí una emoción fuerte, y dije: esto es un milagro. Jamás pensé que mi tarea de actor iba a ser el instrumento para salvar esa vida. Esa experiencia me marcó y le dije a Dios: ‘quiero ser un soldado más para defender a los indefensos’. Empecé a asistir a las clínicas de aborto para ofrecer alternativas: hablo con las chicas que ven esa única salida, que ni siquiera sus padres saben lo que van a hacer por leyes absurdas de EE. UU, donde está prohibido venderles cigarrillos o alcohol por su edad, pero sí abortar en secreto.
En pocas palabras
"Mi cambio interior fue hace ocho años y nunca acaba, pero al menos ya uno sabe para dónde va, cuál es el camino y el propósito de su vida”.
"Si toda mujer tuviera el vientre de cristal, ninguna abortaría, porque vería el milagro que lleva dentro”.
Vida en comunión: Verástegui predica y practica
• Para tratar de ser coherente con lo que predica, Eduardo Verástegui tiene una disciplina espiritual en la que lee el Nuevo Testamento, va a misa y reza el rosario a la Virgen, la liturgia de las horas y el angelus todos los días.
• Además, se confiesa una vez a la semana, tiene un director espiritual y hace retiros espirituales.
• También creó la Fundación La Guadalupe, donde sirve a las personas más necesitadas. “Es una vida sacramental, de servicio, de silencio, de oración y de contemplación, lo que me permite ver con claridad y tener la fortaleza que viene de Dios para poder avanzar en los caminos de él”, dice el actor mexicano.
jueves, 22 de abril de 2010
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